Hace cien años, el empresario japonés-tokiense Takeshi Yamashita soñó con fundar una empresa que, en lugar de basarse en las importaciones, pudiese desarrollar y fabricar microscopios fabricados íntegramente en Japón.
Fue este deseo de creación que marcó el origen de Olympus cuya fundación tuvo lugar el 12 de octubre de 1919. Nuestra empresa, que al principio se llamó Takachiho Seisakusho, en sus inicios se especializó en termómetros y microscopios. Seis meses más tarde de la fundación de Olympus, Yamashita y sus ingenieros consiguieron su objetivo original con el microscopio Asahi. A pesar de tres décadas difíciles, exacerbadas por el gran terremoto de Kantō y la Segunda Guerra Mundial, Yamashita dirigió a Olympus a través de un camino innovador que vio nacer microscopios galardonados con el fin de ayudar en la investigación y práctica avanzadas de las ciencias de la vida. Inmediatamente después de la Segunda Guerra Mundial, su actividad comercial floreció convirtiéndose en una de las primeras empresas que reanudó sus operaciones de fabricación posguerra y las condujo a su modernización. A pesar de que han existido muchos hitos históricos a lo largo de los cien años de historia de Olympus, nuestra misión siempre se guiará por la visión original de Takeshi Yamashita: «Crear algo realmente original que aporte valor a la sociedad». | Presentado en 1920, el microscopio Asahi fue nuestro primer producto. |
Cien años de innovación óptica
En 1950, Olympus consiguió un gran avance: usamos nuestra creciente experiencia en el campo óptico para desarrollar una gastrocámara para uso clínico, de forma que los médicos podían visualizar el interior del estómago del paciente usando una tecnología mínimamente invasiva.
Durante los años 1960, pasamos a ser uno de los principales fabricantes de la industria de soluciones ópticas, con innovaciones en dispositivos médicos, cámaras de consumo y herramientas industriales. Durante todo este tiempo, seguimos trabajando para mejorar la funcionalidad y la facilidad de uso de nuestros productos, centrándonos en las necesidades de nuestros clientes. Durante los años 70, para poder cumplir con la demanda creciente y en constante evolución de la industria de microscopía, desarrollamos tres series de microscopios verticales destinadas a aplicaciones específicas: investigación, laboratorio clínico y educación.
Series de microscopios verticales (de izquierda a derecha) lanzadas a lo largo de los años 70: serie AH (1972), serie BH (1974) y serie CH (1976)
Asimismo, una plataforma, o cuerpo principal, fue diseñada como producto estrella de estas series: el microscopio VANOX AH. Esta plataforma se utilizó como referente base para los modelos posteriores. Los requisitos de las diferentes aplicaciones podían satisfacerse al cambiar los componentes según el modelo. Esta plataforma marcó el principio de nuestra transición a los microscopios modulares con componentes personalizables para las distintas aplicaciones. Hoy en día, seguimos fabricando microscopios modulares para que los clientes puedan sacar el máximo provecho de su sistema.
Nuestros microscopios modulares originales ofrecían mayor flexibilidad y facilidad de uso para satisfacer las cambiantes necesidades de los clientes. Los microscopios BH multifuncionales, por ejemplo, permitían a los usuarios cambiar el cabezal o la lente para cambiar a otro método de observación. Entre las opciones disponibles se encontraban la polarización, el contraste de fase, la interferencia diferencial y la microscopia de fluorescencia por transmisión simple.
La serie CH había sido desarrollada para ofrecer versatilidad y permitía una microscopía de polarización simple, de dibujo o epi-iluminación (metalurgia). Por ello, estos productos estaban indicados también para la investigación biológica, el trabajo en el laboratorio clínico y las aplicaciones industriales.
Cien años de avances centrados en el cliente
En 1980, Olympus incorporó la función de enfoque automático (AF) en nuestros microscopios de alto rendimiento. En ese momento, la función AF era una tecnología avanzada. Un mecanismo motorizado simplificaba el arduo proceso para enfocar un objeto. El autoenfoque fue un gran paso adelante en la usabilidad del microscopio, ya que los usuarios podían conseguir un enfoque claro y rápido en una muestra, y así poder concentrarse en la observación.
Esta década también vivió la aparición de los sistemas de microscopios configurables. Estos microscopios versátiles ofrecían lentes de objetivo (de 1X a 100X en aceite) de tubo prolongado (LB) que podían usarse para la observación de campo claro, polarización, fluorescencia y contraste de fase. Esta funcionalidad abrió el camino a los estereomicroscopios avanzados que podían visualizar la estructura en 3D de muestras más grandes, como los embriones o los circuitos eléctricos.
Cien años de evolución tecnológica
Los años 1980 y 1990 trajeron consigo una ola de innovaciones tecnológicas. Los avances en el etiquetado de proteínas fluorescentes, que culminaron en la aplicación de la proteína fluorescente verde (GFP) para procesamiento de imágenes de células vivas, estimularon el desarrollo de productos. La proteína GFP reveló procesos dinámicos dentro de células vivas que antes eran imposibles de observar. Esto condujo a que investigadores del ámbito de las ciencias de la vida requiriesen técnicas de observación de mayor sensibilidad y baja fototoxicidad. Respondimos a esta demanda con los nuevos microscopios confocales, los sistemas de procesamiento de imágenes de células vivas (LCI) y otras soluciones de procesamiento de imágenes espaciales.
Microscopios de escaneo láser confocal FLUOVIEW 300/500 con un sistema de adquisición digno de la era informática, capaces de capturar imágenes de 2048 × 2048 píxeles | A principios de los años 1990, Olympus desarrolló sus primeros microscopios confocales comerciales: el microscopio vertical LSM-GB y el microscopio invertido LSM-GI. Usando la microscopía confocal, los biólogos podían visualizar la distribución espacial de las estructuras orgánicas y las moléculas. Esto les permitió identificar si existían organismos objetivo dentro de la célula. Diversas tecnologías como el rápido escaneo óptico, la detección de luz tenue, el recuento de fotones o los filtros de vidrio de selección óptica con la técnica de revestimiento multicapa de alta precisión, potenciaron las capacidades de nuestros microscopios. En la misma década, se presentaron dos series importantes de productos, dedicadas a las ciencias de la vida: la serie de microscopios FLUOVIEW y la serie de cámaras digitales destinada a los microscopios DP. Los microscopios de escaneo láser confocal FLUOVIEW escaneaban con un láser de excitación para producir imágenes en 3D. Las cámaras de microscopios de la serie DP capturaban imágenes y las guardaban en soportes digitales para poder guardarlas y compartirlas fácilmente. Estas series pasaron a ser la piedra angular de nuestras soluciones para satisfacer la demanda de la investigación avanzada de ciencias de la vida. |
A lo largo de este período también se produjeron rápidos avances en tecnología digital. Con la revolución informática a tope, el desarrollo de productos en varios sectores industriales se benefició de la automatización que proporcionaban los microprocesadores, las unidades centrales de procesamiento (CPU), los procesadores gráficos (GPU) y las memorias digitales.
100 años de imágenes de alta calidad
Para cumplir nuestro compromiso con respecto a las imágenes de alta calidad, desarrollamos y presentamos una nueva línea de objetivos de sistema infinito universal (UIS) a principios de los años 1990. Estos objetivos corregidos infinitamente permitían a los usuarios insertar varios componentes ópticos en la trayectoria de luz, lo que ampliaba drásticamente las capacidades de los microscopios. Por ejemplo, se podía añadir un analizador o un prisma DIC para permitir la polarización sin interferir con la calidad de imagen. También se podía añadir un iluminador epi o cubos de fluorescencia para cambiar el dispositivo y convertirlo en un microscopio de fluorescencia.
Los objetivos UIS no solamente mejoraron enormemente la calidad de las imágenes observadas, sino que también universalizaron los objetivos usados para todos nuestros microscopios.
Unos diez años más tarde, se lanzó la siguiente generación de objetivos de la serie UIS2. Todavía populares hoy en día, los objetivos UIS2 proporcionan imágenes claras de alta resolución, baja autofluorescencia y una capacidad de longitud de onda más prolongada. Los oculares ofrecen mayor transparencia y están fabricados con vidrio sin plomo para ser más ecológicos.
El inicio de los años 2000 fue marcado por el lanzamiento del modelo FLUOVIEW de escaneo a doble láser. El escaneo simultáneo a doble láser —uno para el procesamiento de imagen y otro para la simulación— aumentó el nivel de sensibilidad y permitió el procesamiento de imágenes fluorescentes en tiempo real. Esta innovación permitió a los investigadores observar fenómenos biológicos en tiempo real.
Este tipo de observación se potenció con el lanzamiento de nuestro primer microscopio de escaneo láser multifotón tres años más tarde. Este microscopio permitió reducir el ruido de fondo a medida que el escaneo láser multifotón excitaba solo la región enfocada ópticamente de la molécula fluorescente. Los investigadores en neurociencias podían usar el microscopio para mirar con mayor profundidad el cerebro a diferencia de los modelos más antiguos.
Cien años de diseño sofisticado orientado al usuario
Incluso antes de que la ergonomía se implantase como principio fundamental para el diseño de productos, Olympus ya analizaba formas para que nuestros microscopios fueran más cómodos de usar. Los patólogos y citólogos pasaban muchas horas analizando muestras en los laboratorios y esto impulsó el lanzamiento de un microscopio con una platina de baja posición e inclinación del binocular. Estos elementos permitieron a los médicos apoyar los brazos en la mesa mientras trabajaban e inclinar el ocular para mantener la cabeza en una posición más confortable.
También en los años 2000, patólogos e investigadores pudieron beneficiarse de la capacidad de digitalizar muestras completas usando nuestro escáner de muestra completa (WSI). La digitalización de las imágenes de muestras de vidrio permitió a los patólogos e investigadores oncológicos compartir y debatir datos remotamente con sus homólogos, además de analizarlos cuantitativamente para obtener datos patológicos más precisos. Los investigadores y los patólogos también pudieron acceder a datos de muestras digitales en todo momento sin tener que lidiar con la falta de espacio físico para guardar las muestras de los pacientes. A partir del año 2010, definimos, en cierto modo, el diseño y la funcionalidad como el fundamento de los microscopios. Desarrollamos una fuente de luz LED que proporcionaría alta luminosidad, colores fieles a la realidad y una vida útil de 50 000 horas, maximizando los beneficios en términos de economía y actividad del sistema. El microscopio BX46 demuestra nuestro compromiso con la comodidad del usuario. Cada componente del proceso fue diseñado ergonómicamente. Asimismo, diversas características innovadoras, como los portaobjetivos extraíbles y las platinas ultra bajas, han ayudado a incorporar los principios físicos que deben respetarse en la microscopía de rutina repetitiva. El microscopio BX53 para patología clínica, lanzado en 2017, cuenta con funcionalidades de control de iluminación que permitían la sincronización del brillo con la magnificación del objetivo. Estas funcionalidades proporcionaron otra manera de llevar a cabo observaciones microscópicas más cómodas y menos lentas. | El microscopio BX45 de Olympus, diseñado para la comodidad del usuario, cuenta con un cuerpo novedoso en forma de Y. |
Otras innovaciones destacadas incluyen:
- Sistema de soporte modular intercambiable para los microscopios invertidos, cuya flexibilidad permitiría analizar muestras más diversas y cubrir una variedad de aplicaciones más amplia en el ámbito de las ciencias de la vida.
- Lanzamiento del software de análisis de imágenes cellSens en dos modos: uno con una interfaz simple e intuitiva para uso clínico y otro con parámetros avanzados para análisis de imágenes dedicados a la investigación avanzada.
Cien años de servicio notable dentro de la comunidad científica
Los avances tecnológicos en esta década se han centrado en el mejoramiento de la velocidad y calidad del procesamiento de imágenes en laboratorio. Para los investigadores, los sensores científicos de imagen CMOS han proporcionado un enorme beneficio debido a su alta eficiencia cuántica y microscopía de súper resolución. En el campo clínico, el plazo de respuesta para los análisis de laboratorio se ha visto reducido, en parte, debido a que los diagnósticos son más de tipo molecular y genético, requiriendo menos tiempo.
Arriba: Imagen de transfección con vector AAV, observada por arco iris neural en células de Purkinje con anticuerpos. Pueden observarse somatos de células de Purkinje, dendritas y axones, así como algunos tintes específicos de células de gránulos adquiridos con el microscopio FV3000. Abajo izq.: esferoide aclarado de células HT-29 teñidas con DAPI (nuclear) adquirido con el sistema IXplore Spin de Olympus. Abajo der.: Azan teñido capturado por la cámara microscópica digital DP74.
A finales de los años 2000, los científicos modernos necesitan nuevas características de los microscopios para investigación y observación científica avanzada. Por ejemplo, se necesitaba un procesamiento de imágenes más rápido para observar fenómenos más rápidos. También se necesitaba un procesamiento de imágenes más tenue para observar señales débiles, visualizar muestras más delicadas y realizar observaciones de células vivas durante periodos de tiempo prolongados. Los científicos también necesitaban una resolución espectral más precisa para visualizar múltiples genes y proteínas con el objetivo de revelar toda la trayectoria de los fenómenos biológicos.
Para satisfacer estas demandas, creamos el microscopio de escaneo láser confocal FLUOVIEW FV3000 en 2016. La serie FV3000, además de dotarse de la óptica de alta calidad, proporcionaría alta sensibilidad, procesamiento multicanal de imágenes de alta velocidad de nivel macro a micro y una interfaz de usuario a carácter intuitivo basada en el proceso de trabajo. El estativo es modular y flexible para las diversas aplicaciones y los distintos presupuestos. Los científicos pueden escoger entre una configuración simple y mínima hasta un procesamiento de imágenes avanzado y completamente personalizable.
La serie IXplore contiene sistemas basados en soluciones que ofrecen múltiples configuraciones
Un año después, Olympus introducía el sistema IXplore. Hay seis configuraciones IXplore disponibles para seleccionar el sistema que mejor se adapte a las necesidades de observación de los investigadores: un modelo estándar para la documentación simple, y cinco opciones especializadas para la observación multidimensional motorizada, el procesamiento de imágenes de células vivas, la TIRF (microscopía por fluorescencia de reflexión interna total), la configuración confocal con disco giratorio, y aquella de súper resolución.
Ir más allá del límite óptico con la súper resolución se ha convertido en la nueva realidad de la microscopía. La configuración de súper resolución (OSR) de Olympus está disponible en el sistema de microscopio IXplore SpinSR10. Cuenta con diversos modos para fluorescencia de campo amplio, procesamiento de imágenes confocales y súper resolución. Estas características permiten a los investigadores observar con mayor profundidad en sus muestras, de forma más rápida y sencilla.
En la última década, la tecnología de Olympus se ha beneficiado de diversas aplicaciones con niveles más altos de resolución y un funcionamiento más rápido. Estas innovaciones han ayudado a revolucionar la definición y el enfoque de la ciencia. Nuestros investigadores siguen desarrollando e innovando sistemas de procesamiento de imágenes para los laboratorios clínicos y de investigación. Buscamos continuamente soluciones más rápidas, más potentes e incluso más ergonómicas. Este ánimo de mejora se ilustra en los nuevos objetivos X Line, gracias a un innovador proceso de fabricación que ofrece una apertura numérica mejorada simultáneamente, planitud de imagen y corrección de aberración cromática para lograr una calidad de imagen excelente.
El espíritu creativo de nuestro fundador, Takeshi Yamashita, vive en todos los pasos de nuestra misión y se ejemplifica en nuestra promesa de ser «True to Life» (consecuentes con la vida), que implica ofrecer soluciones inteligentes e innovadoras para cambiar el mundo que nos rodea, contribuyendo a mejorar la sociedad de todos.
Manténgase al día de nuestras futuras innovaciones suscribiéndose al Discovery Blog.
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